Martes, 19 de Julio de 2005 14:42

Corduba 05. Lucena. Un curso ense�a a los docentes c�mo usar el juego para evitar que los alumnos odien las matem�ticas

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Utilizar el juego como recurso did�ctico para el aprendizaje de las Matem�ticas es el fin �ltimo del curso sobre "Juegos para la Ense�anza y Aprendizaje de las Matem�ticas", que est� celebrando durante esta primera semana de los Seminarios Universitarios de Lucena.

Tradicionalmente, los escolares muestran una especial animadversi�n hacia la asignatura de Matem�ticas. Por eso, este curso recomienda ense�ar a trav�s de estas t�cnicas la asignatura en Primaria, ya que es en ese momento cuando el alumno puede sentir atracci�n o acabar odiando a una asignatura.

Pero no hay que olvidar que las Matem�ticas no son s�lo f�rmulas y ecuaciones, sino que tambi�n incluye otras disciplinas como la l�gica o el razonamiento. "Los escolares consideran que se trata de una materia dif�cil y que poco o nada les va a servir en la vida, pero esa percepci�n de los alumnos es culpa de los profesores y no de la propia materia", explica el profesor del Departamento de Matem�ticas de la Universidad de C�rdoba Alexander Maz.

Con este curso, dirigido a los profesores de Primaria, se pretende ofrecer a los docentes recursos did�cticos, a modo de juegos, capaces de acercar los alumnos a esta asignatura de una forma divertida y que cree en ellos una empat�a hacia esta materia. La idea es que los maestros conozcan el concepto matem�tico que esconde cada uno de estos juegos.

Para evitar esa animadversi�n, lo mejor es trabajar con los ni�os desde el principio, que es cuando se ponen los cimientos de su aprendizaje. "Lo que se aprende jugando se aprende m�s deprisa y no se olvida", a�ade el profesor.

Por otro lado, estos juegos van destinados a mostrar la conexi�n directa que existe entre las Matem�ticas y la vida real. "Los ni�os se sorprenden de que la vida est� llena de relaciones con las Matem�ticas y, al ver la aplicaci�n pr�ctica de esta materia, la consideran m�s interesante", apunta Maz.