Un equipo de investigadores del Consejo Superior de Investigaciones Cient�ficas espa�ol y la Universidad de C�rdoba ha conseguido multiplicar por 50 los valores de �cidos grasos omega-3 presentes en la leche de cabra sin manipulaci�n gen�tica de los animales.
Un estudio elaborado por el Consejo Superior de Investigaciones Cient�ficas (CSIC) y la Universidad de C�rdoba ha desarrollado una nueva estrategia para obtener de forma natural leche rica en �cidos grasos omega-3, nutrientes asociados con la disminuci�n del riesgo de enfermedades cardiovasculares. La t�cnica, descrita en la revista Journal of Dairy Science*, se basa en conseguir que los �cidos grasos omega-3 con los que se suplementa la dieta del ganado lleguen intactos al intestino delgado, evitando su paso por el rumen.
En el rumen, los �cidos grasos omega-3 sufren una transformaci�n enzim�tica denominada biohidrogenaci�n. Esta investigaci�n ha centrado sus esfuerzos en evitar que pasen por esta cavidad para que lleguen intactos al intestino. Para ello se han empleado cabras entrenadas desde su nacimiento para mantener activo el reflejo de la gotera reticular en la edad adulta, aunque por lo dem�s son rumiantes funcionales. El entrenamiento ha consistido en mantener los est�mulos sensoriales de los animales ofreciendo diariamente un biber�n con una peque�a cantidad de lactorreemplazante a las cabras desde su destete.
La leche obtenida mediante este nuevo m�todo presenta un contenido en �cidos grasos omega-3, en concreto de �cido ?-linol�nico, del 13 %, lo que supone 10 veces m�s que cuando el alimento enriquecido transita por el rumen. �Es un porcentaje de omega-3 in�dito hasta el momento, que multiplica por 50 los valores habituales de �cido ?-linol�nico presentes en la grasa l�ctea procedente de rumiantes que no han recibido ning�n suplemento lip�dico�, comenta Miguel �ngel de la Fuente, del Instituto de Investigaci�n en Ciencias de la Alimentaci�n del CSIC. Adem�s, esta estrategia reduce sustancial y simult�neamente el contenido en leche de �cidos grasos trans y el porcentaje de �cidos grasos saturados, ambos considerados poco saludables desde un punto de vista nutricional.
