Los pa�ses recientemente incorporados a la Uni�n Europea (UE) no constituyen un peligro real en relaci�n con la fuga de empresas espa�olas. As� lo ha afirmado la consejera para asuntos de la UE de la Embajada de Hungr�a, Angel Klimes de Gosztonyi, que ha participado hoy en la Universidad de Verano Corduba 2004.
Para Klimes, que ha intervenido en el curso "Las claves de negocio con los nuevos pa�ses de la UE", la producci�n industrial avanzada "necesita no s�lo mano de obra, sino tambi�n infraestructuras de comunicaciones y tecnol�gicas", aspectos en los que los pa�ses de la ampliaci�n "se encuentran mucho menos desarrollados".
En cualquier caso, considera que la deslocalizaci�n de empresas radicadas en Espa�a a Hungr�a o a otros pa�ses que recientemente se han incorporado a la UE tendr�n car�cter "temporal", porque "las multinacionales que �nicamente buscan mano de obra barata acabar�n traslad�ndose a otros pa�ses como China o India, que ofrecen m�s facilidades a las inversiones extranjeras y tienen legislaciones m�s laxas en materia medioambiental".
En este sentido, la representante diplom�tica ha abogado por establecer lazos de cooperaci�n entre Espa�a y Hungr�a m�s all� del cl�sico binomio exportaci�n-importaci�n. A su juicio, ser�a positivo para las empresas espa�olas instalar parte de su producci�n en Hungr�a, donde la mano de obra tiene unos costes inferiores al tiempo que cuenta con cualificaci�n suficiente.
Klimes, que ha abogado por establecer una mayor intercambio entre los estudiantes de ambos pa�ses, ha afirmado que los productos andaluces asociados a la dieta mediterr�nea, como el aceite de oliva, tienen "buenas perspectivas" si se ofrecen a "precios asequibles", ya que hay que tener en cuenta el menor poder adquisitivo de la poblaci�n h�ngara.